Ayer cerraba sus puertas hasta el año que viene el Salón del Manga de Barcelona. Ha sido un intenso fin de semana en el que os hemos ido comentando lo más relevante de Nintendo en esta feria y hemos repasado el interesante material de la saga que allí se podía encontrar. El certamen se ha vuelto a cerrar con nuevos récords: miles de participantes más que en la pasado edición (hasta 137.000 fans de la cultura japonesa han visitado el Salón) y nuevos espacios que ampliaban hasta los 60.000 metros cuadrados la zona visitable; para el año que viene seguramente vuelvan a ampliar el espacio disponible para dar cabida a los visitantes, que llegaron a agotar las entradas.
A modo de despedida de la feria, mostrar brevemente la exposición que esta año presidía el Palacio 1 celebrando los treinta años de los videojuegos de Super Mario.
Y hasta aquí lo más destacado de la exposición. El resto, eran unos paneles sobre los principales juegos del fontanero (desde su debú en Donkey Kong y Super Mario Bros. hasta los recientes Super Mario 3D World y Super Mario Maker) que realmente aportaban poca información y que ofrecían unas tristes hojas impresas con capturas de pantalla de los juegos. Realmente, se podían haber esmerado un poco más en esta exposición. Para el año que viene, en el que The Legend of Zelda cumple 30 años, esperamos que, en el caso de que hubiese una exposición, esté más trabajada.
Lo más interesante de la exposición, las plantillas con las que crearon los niveles del SUper Mario Bros. en 1985
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