Si bien Breath of the Wild incluye ligeros matices de malicia y máquinas de matar a cuatro patas, el estilo y el tono son ligeros, coloridos y fantásticos. El estilo artístico podría compararse al de Skyward Sword que incluye una dirección artística muy del tipo Pixar con sus colores vibrantes y formas suaves. Esto plantea la siguiente pregunta: ¿Es esto lo que esperamos de los próximos juegos de la saga de The Legend of Zelda?
Hay que decir que el carisma que emana Breath of the Wild enamora, pero no hace olvidar la oscura fantasía que encontrábamos en Twilight Princess o el aire maldito y agobiante atmósfera de Majora’s Mask. Transformarnos en una bestia mientras gruñimos de dolor para luchar sin vernos el verdadero rostro o sanar el alma de espíritus torturados eran toques oscuros en la historia de la franquicia de Zelda que la hacen lucir como serie, eso es lo que sería bueno que volviera.
Majora’s Mask y su tenebroso mundo han sido algo único en la saga… muchos esperan volver a ver algo así, no remakes o Twilight Princess.
Y vosotros, ¿Qué opináis? ¿Os gustaría ver un lado oscuro en Zelda de nuevo? ¿Echáis de menos ese sentimiento de melancolía de la oscuridad de otros títulos? ¿O sois felices tal y cómo esta todo ahora? ¡Déjanos tu opinión en la caja de comentarios!
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