Siguen apareciendo fragmentos de la entrevista que Eiji Aonuma, productor de la serie The Legend of Zelda, concedió a la revista británica EDGE hablando de la nueva entrega de la saga, Breath of the Wild.
En esta ocasión Aonuma habla de que su pretensión no es crear un juego siniestro.
No queríamos crear algo oscuro ni que diese miedo. He estado en montañas por la noche y he visto las estrellas; estaba muy oscuro, pero la luz de las estrellas hacía que se pudiese ver. Quería que nuestro ambiente nocturno fuese algo como eso. Y cuando está oscuro, hay elementos en el ambiente que brillan, que el jugador puede utilizar para orientarse.
El desarrollador japonés reconoció que implementar el ciclo día/noche en el juego resultó extremadamente difícil. El cambio en el juego cuando cae el sol no solo es de luz o de sonido ambiental, diferentes mecánicas se ven afectadas, por ejemplo la bajada de temperatura o el medidor de sigilo.
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