El E3 de 2016, que tuvo lugar en junio en Los Angeles, significó un gran despliegue de medios para Nintendo, que dedicó todo un área tematizada a Breath of the Wild.
Los visitantes no solo tenían disponibles múltiples puestos de juego con la Wii U en los que probar las demos del juego, sino que toda la zona estaba ambientada en la última entrega de la saga: la iluminación, el sonido ambiental, los decorados, etc.
¿Qué fue de la decoración que se utilizo para promocionar el juego? Pues seguramente almacenada en algún lugar, o quizás destruida: estos decorados se crearon para el evento, y una vez finalizado es posible que la empresa que los montó los recogiese para reciclarlos, que es lo que habitualmente sucede en estos casos.
Pero sabemos que al menos una parte de la escenografía ha perdurado. Se trata de un arquero Bokoblin, que rodeado de piedras y barriles se encuentra actualmente en la sede de Nintendo of America, en Redmon (Washington). Desafortunadamente, estas oficinas no se pueden visitar (a no ser que trabajes allí, claro).
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