Las raíces de la serie The Legend of Zelda llevan implantadas en su ADN desde 1986, y no fue hasta hace seis años que Nintendo decidió dejar de apostar por lo antiguo y renovarse con Breath of the Wild, aunque eso supuso sacrificios.
A pesar de que por el camino se perdieron objetos clave como el gancho, el látigo, o demás artilugios diseñados para superar obstáculos, Nintendo supo resolver esas carencias con nuevas habilidades, pero todo lo demás se quedó atrás, y gracias a una nueva entrevista de RTLNieuws en la que aparecen Eiji Aonuma y Hidemaro Fujibayashi, podemos afirmar que Nintendo ya no quiere mirar a ese pasado, y prefiere centrarse en el futuro.
La entrevista revela pequeños segmentos en los que aclara que “no se fijaron en Ocarina of Time“, o que “los templos de Tears of the Kingdom no están inspirados por Ocarina of Time“, sino que surgieron por la naturaleza misma del título. Entre otras líneas, Aonuma tuvo que responder ante la siguiente pregunta nostálgica:
“Las dos últimas entregas son muy distintas entre sí. Los fanáticos más longevos dicen que prefieren los antiguos juegos de Zelda clásicos. ¿Os gustaría volver a hacer alguno?
Aonuma: Es difícil saber qué haremos en el futuro. Pero claro, gracias a los Zelda antiguos, hemos podido crear un juego como Tears of the Kingdom. El juego nació de ideas que tuvimos en el pasado. Siempre intentamos hacer algo que ofrezca más que las antiguas entregas. En lo que respecta a los juegos antiguos, ya no estamos tan obcecados con ellos. Preferimos centrarnos en el futuro.”
También se menciona a Elden Ring, un juego de FROM SOFTWARE, la desarrolladora madre de los juegos Souls que revolucionó su género a principios de 2022. La pregunta sobre el juego tuvo un carácter sobre su inspiración:
“Se dice que el popular juego Elden Ring se inspiró en Breath of the Wild. ¿Supuso Elden Ring una inspiración para vosotros el año pasado?
Fujibayashi: Lo sentimos, pero no pudimos darle una oportunidad a ese juego. Estábamos muy ocupados desarrollando Tears of the Kingdom, así que no pudimos jugarlo. Pero hemos oído hablar de él. E incluso aunque tuviéramos tiempo para jugar a otros juegos, no habríamos reutilizado ideas que provinieran de ellos. Cuando hacemos un juego, establecemos un concepto general y las ideas que se nos ocurren giran en torno a él.”
Entre ello, Aonuma destaca que, “aunque se parezcan, no pondría ideas de otros en un juego que él hiciera”, y con respecto a la serie The Legend of Zelda, afirma que no le da miedo continuar con ella, pues “tiene mucho espacio para explorar nuevas ideas”, y “estar atascado en hacer solo juegos de Zelda” le resulta “agradable”.
Terminando con la entrevista, Aonuma confiesa que, como es padre, empieza a ver a Link de la misma manera en la que ve a sus hijos:
“¿Tus hijos te ayudan a probar los juegos?”
Aonuma: Como soy su padre, creo que no les gusta darme su opinión sobre los juegos. Los juegan, sí, son grandes fans de Zelda, pero si les pregunto si les ha gustado el juego, lo edulcoran con un “ha estado interesante”. Si les sigo haciendo preguntas, prefieren no hablar de ello, y como desarrollador de videojuegos que soy, me da un poco de vergüenza seguir preguntándoles.Desde que tengo hijos veo a Link de otra manera. En el primer juego era, en gran parte, un personaje guay, pero conforme el tiempo avanza, empiezo a sentir que Link es mi propio hijo. En Tears of the Kingdom veo similitudes en cómo mis hijos y Link están ambos creciendo. A veces miro a Link y pienso “ha pasado por tantas cosas y ha crecido tanto…”. Y a su vez, pienso lo mismo por el equipo de desarrollo.”
Con esto concluimos las partes más interesantes de la entrevista realizada por Bastiaan Vroegop, de RTLnieuws, a los desarrolladores principales de The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom.
